Pues por fin pasó Castro 2010. Entre sol y lluvia pasamos el día. Este año ha sido un pelín peculiar, ha pasado un poco sin pena ni gloria. No sé dónde se ha metido la gente que no he visto a nadie. Dejo aquí este vídeo, espero que logre transmitir lo que sentí en ese momento, una profunda emoción que pone los pelos de punta.
Gracias a José Luis y a Beatriz siempre podremos recordar cómo fue este día.
martes, 20 de abril de 2010
sábado, 3 de abril de 2010
Malas sensaciones.
Mira que tenía yo esperanza en esta Semana Santa... Tenía la sensación, o por lo menos las ganas, de que fuera un poco ¿divertida? Ya veo que no. Estamos cuatro gatos, y descoordinados. Para colmo no hace ni buen tiempo, eso no es novedad, en estas fechas no suele hacer bueno ni de casualidad. No sé por qué me da en la nariz que esta Semana Santa va a pasar sin pena ni gloria. Es que me veo esta noche igual que todas las noches, tirada en el sofá buscando algo que ver en la tele. Imagino que al final sí saldré, en eso quedé hace un par de días. En cualquier caso, presiento que no va a ser buena noche, tengo malas sensaciones.
No sólo tengo malas sensaciones por lo de salir o no. Es que de nuevo vuelvo a sentir soledad. Otra vez me encuentro desubicada, fuera de lugar. No sé si soy yo o es el mundo que está a mi alrededor el que gira raro. No entiendo a la gente, no me entiendo yo. A lo mejor estoy equivocada, pero me parece que no es del todo correcto pedir favores o detalles cuando no se da nada a cambio. No tengo ganas de explicar por qué digo esto.
Voy a dejarlo aquí que no tengo ganas de ponerme más triste de lo que estoy. Mañana será otro día, mejor espero, que este ha amanecido muy mal.
No sólo tengo malas sensaciones por lo de salir o no. Es que de nuevo vuelvo a sentir soledad. Otra vez me encuentro desubicada, fuera de lugar. No sé si soy yo o es el mundo que está a mi alrededor el que gira raro. No entiendo a la gente, no me entiendo yo. A lo mejor estoy equivocada, pero me parece que no es del todo correcto pedir favores o detalles cuando no se da nada a cambio. No tengo ganas de explicar por qué digo esto.
Voy a dejarlo aquí que no tengo ganas de ponerme más triste de lo que estoy. Mañana será otro día, mejor espero, que este ha amanecido muy mal.
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