martes, 10 de mayo de 2011

"Cantares" Joan Manuel Serrat & Joaquin Sabina



No me puedo creer que no haya puesto nunca esta canción.

lunes, 2 de mayo de 2011

El día después.

Hoy es el día después de Castro. Ese Castro que este año se ha retrasado un poquillo. Todo apuntaba a que se aplazaría una semana más; el pronóstico del tiempo se equivocó, apenas llovió. Lo cierto es que, si de mí hubiera dependido, no habríamos ido. Creo que nos merecíamos un Castro seco, porque vaya últimos años llevamos... Aunque mentiría si dijera que no quería ir a Castro por la lluvia; no quería ir por mi estado anímico, por la negatividad que invade mis pensamientos. ¡Qué voy a hacerle si estoy de no!
Es que esta etapa me está descentrando mucho, muchísimo; menos mal que poco a poco van pasando los días y esto va a terminar en breve. Estoy en un estado de alteración constante, de desorden emocional y anímico. De pronto me estoy convirtiendo en una persona desconfiada, suspicaz. No me creo nada, no espero nada de nadie, me siento defraudada con demasiadas cosas. No me gusta nada tener estas sensaciones, estos sentimientos, porque sí es verdad que me están haciendo cambiar mi actitud con ciertas personas, algunas de ellas no lo merecen. Afortunadamente sé que no soy así y que el hecho de haberme dado cuenta, hace que vaya a rectificar esta forma de ser.
El caso es que ha pasado Castro. Muy distinto de los demás: no me he divertido, he estado rara, hasta me he encontrado físicamente mal, tanto es así, que casi me vuelvo a casa nada más comer. Pero hoy es distinto; hoy es el día después de Castro. He dormido como hacía mucho tiempo, y como tengo la des-afortunada suerte de no "trabajar", pues he podido levantarme cuando he querido. La hora en cuestión eran casi las 9:00 de la mañana ¡guau, qué logro! (por cierto, me he despertado alucinando con la noticia de la ¿muerte? de Ben Laden)
Desde que he amanecido he sentido que era un día distinto, el primer día de otra etapa. Me siento tranquila, optimista, con fuerza, y también con un color en la cara muy peculiar... He vuelto a darme cuenta, a ser consciente de lo que me importa la gente a la que quiero, lo que les necesito y de todo lo que paso de mucha otra gente. Poco a poco van saliendo las cosas que tengo entre manos, los proyectos que atañen a mi gente; cosas bonitas, ilusionantes de las que daré cuenta aquí cuando sea el momento oportuno.