martes, 29 de diciembre de 2015

Felices fiestas y Feliz 2016

Dos diítas nada más para despedirnos de 2015.
Sólo iba a publicar la felicitación de este año, a modo de recuerdo, pero me doy cuenta de que este 2015 termina siendo un año bastante bueno en general. 
Esta es mi felicitación para 2016, con una imagen y un mensaje poco navideño... en la portada, en el interior sin embargo: 

" En ocasiones la vida te depara cosas maravillosas, en ocasiones la vida te regala a personas maravillosas con las que siempre puedes contar. Gracias por estar a mi lado. ¡Feliz Navidad y Feliz 2016!"


Si bien, no me puedo olvidar de que en este año ha habido de todo... como siempre: ratos buenos, momentos malos, épocas de apatía, instantes felices, etapas de incertidumbre... y es que eso es la vida, y aunque decirlo resulte obvio es mejor no olvidarlo. 

A esta imagen le sigue un texto precioso que no puedo dejar de reproducir, porque fue fruto de un momento importante de este mayo.


"Ayer fue un día muy especial. Ayer terminó una etapa y dio comienzo otra; ayer fue el día en el que las cartas se pusieron sobre la mesa y se jugó la partida. Ayer quedó claro que es mejor jugar sin hacer trampas...
Un millón de gracias a todos y cada uno de vosotros por estar ahí. 
Un millón de gracias a mi familia por el día a día, por estar siempre apoyándome, ayudándome en todo momento; uno es lo que es por su trabajo y por el lugar de donde viene, y yo vengo de uno muy, muy, muy bueno. Gracias, gracias, gracias, infinitas gracias mamá y papá, muchísimas gracias hermanos, gracias abuelos, gracias queridos primos y tíos.
Un millón de gracias a mis amig@s, los más cercanos y los más lejanos, los de una parte y los de otra; mis niñas y mis otras niñas... Gracias de todo corazón por tratar de entenderme y por respetarme, por saber disculpar mis ausencias, por estar cuando lo necesito. Siempre encuentro una mano tendida si hace falta, siempre responde alguien al otro lado del teléfono, siempre tengo con quien compartir las risas y los llantos. No hace falta decir cuánto os quiero.
Un millón de gracias a todos aquellos que la vida ha puesto en mi camino: alumnos, vecinos, conocidos, compañer@s de trabajo,... que me demuestran que me aprecian y me valoran. También son ya parte importante de mi vida. También son para mí necesarios, muchas veces imprescindibles.
Un millón de gracias al equipo que formamos para afrontar este reto, no podía tener mejores compañeros de viaje. Entre todos vamos a lograr todo que esperamos para nuestro pueblo.
Un millón de gracias Caleruega (Burgos).
Siempre aquí.
Lidia Arribas Delgado"


Después de verano todo han sido prisas y nervios porque, por fin, mi pequeño gran proyecto iba a concretarse; mi CASA. Como también dejé ya por escrito las sensaciones del momento, pues ahí van:




"Lo que empezó hace unos meses como un propósito a largo plazo poco a poco se ha ido convirtiendo en un sueño, a veces disfrazado de pesadilla..., y hoy parece que ya toma forma de proyecto realizable. Ha sido un camino lleno de curvas, pero con paso firme se llega y con amigos de la mano mejor todavía.
¡¡¡Un millón de gracias a mis acompañantes de andadura!!! Nada de esto hubiera sido posible sin el ánimo de mi familia y de mis niñas ¡siempre ahí apoyándome! Gracias a todos los que se han ilusionado con este proyecto. Un millón de gracias a mis primos de Cumabe por hacer que pareciera fácil y muchísimas gracias a ti, Marta Torralba Arribas por ser la artífice de esto, por poner todo tu esfuerzo y dedicación en ello, además en tiempo récord; gracias por ilusionarte con el reto tanto como yo.
Algún día será una realidad y todos aquellos que formáis parte mi vida tendréis un huequito en mi casa. Jajaja, algunos tendrán más hueco que otros, claro está. 

Lo importante es seguir caminando, pues sigamos caminando.
 — me siento maravillosamente con Marta Torralba Arribas."


Ains, pero lo que sí me queda de este 2015 es que de la manera más casual, menos esperada y más tonta posible, se cruzó en mi camino esa persona que llega para cambiar tus esquemas, para hacer que todo deje de ser como antes. Ha llegado y, ha llegado bien; de una manera tranquila, con calma, haciendo todo muy fácil. ¡Quién me lo iba a decir! Gracias por aparecer, gracias por querer complicarte la vida conmigo :)) Gracias por aportarme la estabilidad y seguridad que necesito. Gracias por querer caminar conmigo, gracias por tu mano para agarrarme, gracias por tener la puerta abierta siempre para mí. Gracias por el 13 de septiembre.

Caminando hacia 2016 con toda la ilusión y fuerza del mundo. Así sí.

Por cierto, que además he tenido la suerte de que me toque la cesta de Navidad del bar "La plaza". jijiji.






lunes, 12 de octubre de 2015

"Es caprichoso el azar" Joan Manuel Serrat.

Sí, es verdad. Es caprichoso el azar. Y de pronto alguien pasa por delante de ti y todo cambia. Lo que siempre habías pensado ya no tiene sentido, todos los planes se trastocan y de pronto ya nada es lo mismo.
Sí el azar caprichoso jugó un 12 de septiembre, y la partida aún está por terminar.

Fue sin querer, es caprichoso el azar, No te busqué ni me viniste a buscar. Tú estabas donde no tenías que estar y yo pasé, pasé sin querer pasar... Tanto tiempo esperándote, tanto tiempo esperándote...


miércoles, 27 de mayo de 2015

Ladran, luego cabalgamos.

Lo que aquí sigue es un agradecimiento extensivo a todas aquellas personas que de un modo u otro están a mi alrededor, a todas aquellas personas con la que cuento, a todas las personas que durante los 8 años que llevo en el Ayuntamiento me han apoyado, a todas esas personas que me han ayudado en estos días tan duros, tan difíciles, en lo que una vez más "ciertos seres humanos" dejan patentes sus miserias y sus bajezas... a todos aquellos con los que cuento para estos 4 años más que vienen por delante. Cuento con su colaboración y con sus críticas, faltaría más.

Ayer fue un día muy especial. Ayer terminó una etapa y dio comienzo otra; ayer fue el día en el que las cartas se pusieron sobre la mesa y se jugó la partida. Ayer quedó claro que es mejor jugar sin hacer trampas...
Un millón de gracias a todos y cada uno de vosotros por estar ahí. 
Un millón de gracias a mi familia por el día a día, por estar siempre apoyándome, ayudándome en todo momento; uno es lo que es por su trabajo y por el lugar de donde viene, y yo vengo de uno muy, muy, muy bueno. Gracias, gracias, gracias, infinitas gracias mamá y papá, muchísimas gracias hermanos, gracias abuelos, gracias queridos primos y tíos.
Un millón de gracias a mis amig@s, los más cercanos y los más lejanos, los de una parte y los de otra; mis niñas y mis otras niñas... Gracias de todo corazón por tratar de entenderme y por respetarme, por saber disculpar mis ausencias, por estar cuando lo necesito. Siempre encuentro una mano tendida si hace falta, siempre responde alguien al otro lado del teléfono, siempre tengo con quien compartir las risas y los llantos. No hace falta decir cuánto os quiero.
Un millón de gracias a todos aquellos que la vida ha puesto en mi camino: alumnos, vecinos, conocidos, compañer@s de trabajo,... que me demuestran que me aprecian y me valoran. También son ya parte importante de mi vida. También son para mí necesarios, muchas veces imprescindibles.
Un millón de gracias al equipo que formamos para afrontar este reto, no podía tener mejores compañeros de viaje. Entre todos vamos a lograr todo que esperamos para nuestro pueblo.
Un millón de gracias Caleruega (Burgos).
Siempre aquí.
Lidia Arribas Delgado



Como lo hice público en mis redes sociales y no es el sitio de mencionar a gente con nombres y apellidos; pues me lo guardo para mí y para ellos, que de sobra saben quiénes son y, además, con eso evito que se me olvide mencionar a nadie.

A veces la vida es buena y te devuelve lo que le das. Estos son los comentarios que recibí de vuelta, ¡Sin palabras!

¡Un millón de gracias!

sábado, 21 de marzo de 2015

500 noches para una crisis.

Pasó el 19 de marzo, pasó el concierto de SABINA.

El primero de mi vida en el que estoy completamente sola delante de él, bueno, un poco de medio lado... el primero de mi vida en el que hay butacas.
Un concierto completamente distinto a cualquiera de los otros cinco a los que he asistido. Baladitas, canciones lentas, versiones acústicas ¡qué maravilla de Peces de ciudad!


Y a poquitos el mejor guitarreo. No puedo dejar de emocionarme cuando escucho Más de cien mentiras; es pura vida, es una gran verdad. Aunque hay veces que nos cuesta encontrar una sola de esas mentiras. Y cómo no con mi canción, con la siempre vibrante Princesa. Voy a reservarme lo que opino de los que consideran que una de las mejores es Y nos dieron las 10; pues eso...

Los pelos de punta escuchando a Mara Barros cantar Y sin embargo te quiero; impresionante voz, y por supuesto, impresionante Y sin embargo.


En definitiva, que sobran las palabras, que todo lo que pueda decir es poco. Siempre merece mucho la pena ir y verlo y escucharlo. No diré que este es el mejor al que he asistido, no, pero ha sido distinto y también fantástico. Como ayer comentaba: "No es que sea el concierto, no es lo que cante, si no lo que me trasmite; una y mil veces volvería a verle sola o acompañada, sentada o de pie, porque sentir que me emociono, que no se me borra la sonrisa de la cara, que me enervo como una adolescente, que siento ilusión (una mentira, un motivo...) me llena profundamente y a diario (y los fines de semana mucho menos...) no hay (no encuentro, no tengo) tantos momentos en los que pueda sentir cosas así".

Aquí algún recuerdo más: un escenario bien sencillo, pequeño, discreto. Sólo ellos y la proyección. Ains, si me hubiera atrevido, tal vez, a lo mejor, pudiera ser que hasta lo hubiera conocido, no fue así. No importa. Lo que esperaba y quería lo tuve.





lunes, 23 de febrero de 2015

Febrerillo.

¡Qué perezosa estoy en esto de escribir por estos lares! ¡cuánto hace que no me paseo ni pongo nada por aquí! Demasiado, y eso no puede ser. Las buenas costumbres de escribir, para bien o para mal, bobadas o cosas trascendentales, no se pueden perder.

La verdad es que esta nueva etapa en mi vida me tiene un poco descentrada, mucho cambio; poca movilidad, mucho silencio y gente nueva. Es lo que hay. Nunca llueve a gusto de todos, dicen, pero yo creo que ya me estoy acostumbrado a este chirimiri.

El caso es que va pasando febrero y no he hecho ni mención a que ya tengo uno más y ya van 35. Jo, 35 suenan a mayor, a edad de merecer, de hacer cosas definitivas; y tal vez de una vez las tenga que hacer...seguimos caminando, ya veremos cómo se hace camino al andar. He estado más fría de lo normal en este cumpleaños, posiblemente porque se haya adelantado al momento en el que yo tenía pensado cambiar de año. Ahora sí, casi en marzo me parece que va siendo hora de que me acostumbre al nuevo dígito; y lo celebre como se merece, porque se merece una celebración. No sólo por las posibilidades económicas que me ofrece mi nueva situación, sino porque, aunque algunas veces reniegue y despotrique de ello, me apetece un buen momento de amigos, de cariños, de diversión y de risas infinitas por tonterías y conversaciones absurdas. Eso también es la vida, es más, algunas veces ese es el sentido de la vida. Dicho queda, tengo pendiente una celebración.

Mira que es corto febrero, pero aún con todo, mira que pasan cosas.
A primeros, Las candelas. Jajaja, qué divertido estuvo volver a abrir la peña:


A mediados mi cumpleaños, ¡qué bonitas mis felicitaciones! Y los regalos recibidos, de los que este año no hay foto, bueno de uno de ellos sí :) :



Es es momento fue carnaval y esas cosas, pero como si nada...

Tampoco ha estado mal el remate final. Salida de "chicas" (alternativas) a Burgos a ver el musical de Mecano "La fuerza del destino". Me gusto mucho el espectáculo, el sitio, y sobre todo el plan diferente. Hay que repetirlo.





Y por fin mi regalo que llegó en febrero pero que no culminará hasta marzo:


Sí, de nuevo Sabina. Otra vez Él. Mi pequeño gran capricho. Mi debilidad. Por fin otra vez en directo. Por fin solo. Por fin yo delante de él y nadie más. Por fin una cita. Por fin Sabina.

sábado, 10 de enero de 2015

¡Qué la vida siempre merezca la pena!

Lo leí y me gusto, porque es tan real y tan verdad como la vida misma. 
Ahí lo dejo:

"Espero que te caigas.
Que te caigas mil veces y te levantes siempre una más.
Que te partas todos y cada uno de los huesos de tu cuerpo derrapando en este deporte de riesgo que llamamos vida. Y que merezca la pena. Espero que lo hagas y que quede claro que somos piedras que se pulen a golpes bajo la atenta mirada de quienes creen que en una de estas se romperán. Pero no se rompen. Espero que nada consiga partirte en dos.
Espero que recuperes tus pulsaciones y ganes el pulso otra vez. Que aprietes los dientes y le digas al mundo de reojo que sólo sabes caminar hacia delante y que si caminas hacia atrás es solo para recordarte que en peores plazas has toreado. Que aquí hemos venido a jugar.Que juegues. Que las cosas más fuertes son las que nacen en la adversidad.
Espero que saltes. Sí, que saltes desde la decimotercera planta de ese edificio llamado pánico a reconocer que te gusta. Que te den la vuelta a las cartas, que pierdas la partida, que ganes la jugada. Que te pillen el farol. Que te cambien las fichas por amaneceres que algún día contarás. Que merezca la pena.
risk
Espero que te enamores. Y que duela. Que te enamores de esa clase de personas con complejo de lanzadera. De las que te hacen perder el vértigo a cambio de las vistas. Espero que le preguntes a las noches donde está ella y que no te sepan responder. Que no puedas dormir. Que salgas a buscarla. Que la encuentres. Que merezca la pena.
Espero que te pierdas. Que te pierdas en medio de un montón de personas a las que ni por casualidad hubieses imaginado conocer. Espero que dirigirles la palabra sea la única manera que tengas de salir de allí. Espero que salgas. Espero que encuentres a un amigo de verdad. Que lo conserves. Que merezca la pena.
Espero que llores. Que llores hasta salirte de ti mismo y los ejes de la tierra se den la vuelta. Espero que tu mundo se vuelque y que, una vez patas arriba, seas capaz de aprender a vivir boca abajo. Que boca abajo de repente signifique del derecho otra vez.
fear
Espero que se te cierren las puertas. Todas y cada una de las que un día estuvieron abiertas en forma de probabilidad. Que tengas que elegir. Que encuentres la manera de abrir las ventanas y comprendas que la luz que entra en nuestras vidas no es sino aquella que nosotros dejamos que entre. Que vivir en la oscuridad nunca ciega, pero tampoco deja ver.
Espero que mires hacia arriba. Creyendo o sin creer. Que mires hacia arriba y des las gracias. Gracias por ti. Gracias por ellos. Gracias por todo. Gracias. Siempre gracias.
Espero que te vuelvas loco. Que encuentres eso que te mantenga despierto, que no te deje dormir hasta que no esté terminado. Que lo termines. Que sea tuyo. Que lo compartas. Que merezca la pena.
Espero que tires la toalla. Que te acorralen contra las cuerdas y por un momento pienses que nada puede ir peor. Espero que ese momento sea eso, un momento. Que seas tú y solo tú quien decida cuanto dura. Que te gires, que des la cara, que sigas peleando. Siempre peleando. Que siempre tengas un motivo por el que pelear. Que merezca la pena.
Espero que sigas yendo a ese bar. Que siempre tengas algo que contar. Que tengas algo por lo que brindar y que no te falte quien te recuerde que los que se han ido ya no están pero que los que se quedan, se quedan por algo. Espero que siempre tengas a alguien que te diga la verdad. Aunque duela.
wed
Espero que te digan adiós. Y que lo digas tú también, queriendo y sin querer.
Espero que te equivoques tantas veces como puedas. Que puedas pedir perdón por ello otras tantas. Que te perdonen. Que siempre vuelvas a casa con una lección aprendida y la paz de quien sabe que el orgullo destruye más que crea y aleja más que acerca. Que te acerques. Que merezca la pena.
Espero que te rompan el corazón. En trozos muy pequeños. Tan pequeños que ni siquiera parezcan trozos. Tan pequeños que se confundan con el polvo. Espero que te agaches. Que los recojas. Que los vuelvas a encajar en lugares que jamás imaginaste que existirían dentro de ti. Espero que te sacudas las telarañas y los tengas donde hay que tenerlos para volver a hacer eso que todos necesitamos hacer tarde o temprano, confiar.
Espero que vivas.
Que sobrevivas.
Y que merezca la pena.
ECGXIII."