jueves, 30 de septiembre de 2010

Y la abrieron.

Como yo esperaba, la inauguración de la casa de Marta y Pepelu sirvió para mucho más que para juntarnos un rato a tomar una copa. Por fin se develaron los secretos que permanecían ocultos, ya lo puedo decir: Diego y Aurora se casan el próximo año. Queda casi un año entero porque la fecha es el 17 de septiembre de 2011. Esta boda me hace una ilusión increíble, es casi como si se casara mi hermana... Ya estamos maquinando lo que tenemos que maquinar: despedida de soltera, regalito y demás. Es que ya era hora de que alguien se decidiera, que han pasado unos cuantos años desde la última... Como queda mucho tiempo y de momento no hay nada más que contar, ya iré avanzando noticias. El otro secreto, todavía no es nada, sólo es un conato, una intención. Esa intención no es otra que la que tiene mi hermana de tener un bebé. Si todo marcha como tiene que ir, más pronto que tarde seré tía, pero tía de verdad, de un sobrino propio. La idea me encanta, ya era hora también, de que se decidieran a dar algún paso adelante, que por la tozudez, pereza o yo qué sé qué de mi "esto" (llámelo así) estaban estancados en la nada.
El caso es que la noche no fue nada mala, apenas faltaron cuatro contados. Nos reímos un montón, bailamos y bailamos sin fin, y sobre todo cantamos como descosidos. Ahí van las pruebas gráficas:


Y por supuesto bailamos varias veces esta canción, ¡qué grande!:

1 comentario:

Lid dijo...

Merecía entrada aparte la noche de la inauguración.